La travesía de Saturno por Aries en vuestra sexta casa compuesta, es como una especie de entrenamiento con un entrenador bastante estricto pero curiosamente vestido con cuernos de carnero. Seguramente las primeras reacciones serán: "¿Me estás tomando el pelo?, o "¿Por qué no puedes ser como Júpiter y traernos beneficios sin esfuerzo?".

Pero en verdadera esencia, Saturno no es malo, solo es un cabezota con un traje de carnero. Este tránsito os exigirá esfuerzo y determinación en el cuidado de vuestro bienestar, tanto físico como mental. Tal vez os enfrentéis a responsabilidades o desafíos inesperados que pueden dar la impresión de que se burlan de vuestra rutina.

Y justo cuando pensáis que ya no podéis más, Saturno dirá: "¡Espera, aquí tienes otra tarea!", en una especie de humor cósmico seco, que confundiríais con crueldad si no supierais que realmente os está ayudando a cultivar resiliencia. Ah, Saturno, siempre con la broma lista.

A nivel de relaciones, este período puede poner a prueba vuestra capacidad para manejar y equilibrar vuestras responsabilidades personales y las compartidas. No es una tarea fácil y puede causar tensiones, pero recordad, todo entrenamiento conlleva algo de sudor.

El propósito de todo esto es construir una relación sólida y resistente, capaz de superar cualquier revés. Y eso, aunque no sea tan divertido como las fiestas de Júpiter, es igual de esencial en la danza cósmica de la vida. Y es todo gracias a nuestro cabezota favorito con cuernos de carnero, Saturno.

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